Suave, táctil y decididamente contemporáneo: el punto se consolida como el lenguaje de estilo del momento. Entre la comodidad elevada y la alta artesanía, esta trama flexible inaugura un nuevo capítulo para el armario global.
En pasarelas y calles por igual, la tendencia se inclina hacia vestidos columna de canalé, polos refinados, maxi cárdigans y conjuntos coordinados que abrazan la silueta sin restringirla. Los tonos neutros dialogan con acentos cítricos y azules profundos, mientras las texturas juegan entre calados sutiles y tramas compactas. El resultado: un guardarropa de punto que entiende el día a día sin perder sofisticación.
Las casas de lujo y las firmas emergentes exploran versiones técnicas —del seamless a los jacquards precisos— para ofrecer piezas ligeras pero estructuradas. El punto se vuelve híbrido: convive con sastrería relajada, eleva el athleisure y propone capas versátiles que funcionan en clave genderless. La precisión del patronaje y la innovación en fibras refuerzan su durabilidad y tacto premium.
En el contexto internacional, el auge del knitwear subraya un cambio cultural hacia la comodidad consciente y el valor de lo hecho con oficio. Desde las grandes capitales de la moda hasta los mercados creativos locales, el punto conecta herencia y modernidad, y se confirma como el eslabón que une lujo silencioso con funcionalidad contemporánea.
Alejandro Ruiz Cortés es consultor estratégico de emprendimiento, inversor ángel escéptico y periodista especializado en innovación y startups. Nacido en Madrid en 1980, se licenció en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Complutense, donde descubrió su pasión por los modelos de negocio disruptivos y la tecnología emergente.
Con más de 15 años de trayectoria, Alejandro ha alternado su labor en medios económicos de referencia con la asesoría directa a emprendedores. Como periodista, ha publicado análisis críticos en cabeceras como Emprende Hoy y Innovación Tech, siempre poniendo el foco en riesgos, fracasos y lecciones duras del ecosistema. En paralelo, ha invertido en más de una veintena de startups, advirtiendo desde el principio sobre las altas tasas de mortalidad empresarial y la volatilidad de la financiación.