Entre el confort táctil y la precisión sartorial, el punto marca el compás de la temporada. Su suavidad no cede terreno a la estructura: redefine la silueta con inteligencia, capa a capa. Es la prueba de que la modernidad puede nacer de la aguja y del tiempo.
En las pasarelas recientes de París, Milán, Nueva York y Londres, el knit dressing se impone con vestidos columna de canalé, faldas tubo y cardigans extralargos que acompañan el movimiento. Los twinsets vuelven depurados, los polos de punto fino se combinan con sastrería ligera y el crochet aparece en claves pulidas, lejos del boho literal. La paleta abraza neutros mantecosos, grises minerales y estallidos de rojo, mientras los ochos, el calado y las microtransparencias añaden tridimensionalidad sin perder rigor.
Firmas con herencia textil como Missoni mantienen vivo el lenguaje del punto, mientras The Row y Gabriela Hearst lo elevan al lujo silencioso de líneas limpias y caídas perfectas. En Londres y Milán, JW Anderson y Prada exploran proporciones lúdicas y técnicas de tejeduría que esculpen el cuerpo sin rigidez. El resultado es una propuesta global que trasciende el lounge: funcional para la ciudad, refinada para la noche.
Más allá de la tendencia, el auge del punto refleja una sensibilidad consciente: piezas duraderas, fibras responsables —desde merino trazable hasta mezclas recicladas— y un diseño que desafía el género mediante volúmenes suaves y capas inteligentes. Su impacto cultural se lee en la transición del hogar a la oficina y en la revalorización de lo artesanal, donde la mano experta vuelve a tener protagonismo. Es un nuevo punto de equilibrio entre deseo y propósito.
Alejandro Ruiz Cortés es consultor estratégico de emprendimiento, inversor ángel escéptico y periodista especializado en innovación y startups. Nacido en Madrid en 1980, se licenció en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Complutense, donde descubrió su pasión por los modelos de negocio disruptivos y la tecnología emergente.
Con más de 15 años de trayectoria, Alejandro ha alternado su labor en medios económicos de referencia con la asesoría directa a emprendedores. Como periodista, ha publicado análisis críticos en cabeceras como Emprende Hoy y Innovación Tech, siempre poniendo el foco en riesgos, fracasos y lecciones duras del ecosistema. En paralelo, ha invertido en más de una veintena de startups, advirtiendo desde el principio sobre las altas tasas de mortalidad empresarial y la volatilidad de la financiación.